La electrólisis es un proceso electroquímico mediante el cual se obtiene la separación de algún elemento para obtener un compuesto, por medio de la aplicación de electricidad, debido a que no se produce energía eléctrica capaz de realizar tal proceso.
Una aplicación a la electrólisis es la purificación del agua de las piscinas; para realizar esto, se debe colocar 6 gramos de cloruro de sodio por cada litro de agua que se contenga.
Luego, en un purificador ya instalado, generalmente con electrodos de grafito, ocurre el proceso de electrólisis al aplicarse una pequeña cantidad de energía eléctrica.
Este proceso resulta eficaz ya que no se requiere estar aplicando cierta cantidad de NaClO líquido o en pastilla, sino que mediante la cantidad aplicada de esta sal cada cierto tiempo, además de los gastos en el producto químico utilizado, como lo es el NaCl, sumamente barato.